La ruptura es un espejo que nos muestra lo que tenemos que cambiar para poder sanar.

De poco sirve hablar, pensar y enfocarte en tu ex o en el pasado, la salida es mirar el presente y hacia adentro. Observar tus emociones, pensamientos y tu vida en este momento.

El primer paso es decidirte, hay quienes se deciden rápido y quienes tardan más, no importa cuanto tiempo te llevó llegar a este punto, lo importante es que ya estamos aquí, pues si estás en este curso sé que ya te decidiste a sanar.

Sólo nos queda un camino para avanzar y te puedo asegurar que lo que buscas no está en la meta sino en el trayecto, paso a paso nos vamos a ir encontrando y sanando, la clave está en aceptar y dejar fluir.

Aceptar y dejar fluir significa comprender que somos parte de un sistema que no funciona según nuestra voluntad, hay cosas que están fuera de nuestro alcance y saber cuando resignarse es clave para una vida plena. Lo único que funciona según nuestra voluntad somos nosotras mismas.

¿Cómo saber cuando algo está fuera de tu alcance? Cuando somos conscientes es fácil identificarlo, generalmente la vida nos pone muchas señales en forma de sufrimiento para indicarnos que ahí no es.

Cuándo no puedas cambiar la situación que te rodea, cuando tu vida se ha vuelto sufrimiento… cambia tú.